En agosto de 2019 Paizo publicó la segunda edición de su juego insignia, Pathfinder, junto con su Bestiario en ingles. Esta publicación no solo supuso una revisión del juego, sino una apuesta por distanciarse del D&D y su última edición.
Acercándose el final de nuestra campaña de Pathfinder 1ª Ed y con la publicación en nuestro país por parte de Devir del libro Básico y el Bestiario, es hora de lo que supones cambiar de una edición a otra.
El libro básico
No suelo comentar los aspectos físicos de juegos que reseño, pero una de las evidentes mejoras en la edición es, sin duda, el aspecto visual de las 640 páginas que forman el manual y que facilitan la comprensión de las novedades del juego.
La primera edición del manual básico de Pathfinder resultaba enrevesada. Aunque seguía el orden más común en este tipo de libros, moverse por él podía resultar difícil si no se utilizaba algún tipo de marcador o se recurría al glosario final. En la segunda edición de Pathfinder todo se muestra mucho más ordenado y la guía esquemática, añadida en el lateral derecho, permite saber dónde se está y a dónde se quiere ir.
La maquetación y estructura del libro no es muy diferente de la edición anterior, pero con una simplemente lectura consigues hacerte una idea de reglas y trasfondo del juego con facilidad. Por ejemplo, para crear un personaje solo es necesario seguir el orden propuesto por el libro, sin volver hacia atrás en busca de información o consulta.
Los principales cambios
Cuando se produce un cambio en un juego de rol la nueva edición busca mejorar las sensaciones del juego, subsanar “oficialmente” algunos de los problemas de las ediciones anteriores y unificar las reglas dispersas en los distintos manuales en un solo volumen. La segunda edición de Pathfinder, además, busca distanciarse de todas las ediciones de D&D, pero sin perder la esencia que le llevó a lo más alto de los juegos de “mazmorreo”.
Volvemos con la creación de personajes, donde se ha aumentado el nivel de detalle que se puede dar, sin que ello suponga una mayor complejidad. Para ello utiliza el concepto de Dote, que la mayoría de los veteranos en Pathfinder ya manejan con soltura. Las razas y las clases, parte esencial de los personajes, se han ampliado, agrupando algunas y eliminando las que resultaban redundantes.
Por ejemplo, Paladín y Adalid, que tenían una función parecida en el juego, se han unificado en una sola clase, Campeón. Es el jugador, con sus decisiones en la creación y evolución del personaje, el que termina de definir el rol que tomará en la partida.
Las habilidades y su uso es otro de los grandes cambios. Por un lado, se ha reducido su número, muchas de ellas eran anecdóticas; por otro lado, los rangos han dado paso a los niveles, que no solo aclaran mejor el nivel de pericia en la habilidad, además simplifican su manejo al hacer uso de ella.
El combate es dónde se marca la diferencia con otros juegos del mismo estilo. Se ha reducido el tipo de acciones que hay, pasando de siete a tres: Acción individual, Reacción y Acción Gratuita. Ahora, además, cada personaje, desde el primer nivel, podrá realizar tres acciones individuales por ronda. Estos dos aspectos juntos flexibilizan el combate, a la par que terminan de dar una funcionalidad única a los jugadores.
Los motivos para cambiar… o no
Pathfinder 1ª Ed. supuso un reencuentro con el “mazmorreo” clásico. Paizo supo aprovechar su experiencia en juegos de rol para corregir y mejorar una de las ediciones más queridas de D&D, la 3.5.
Cuándo se planteó la posibilidad de cambiar de versión, la respuesta vino en forma de pregunta: “¿Por qué cambiar si Pathfinder (1ª Ed) ya funciona bien?” Variar un juego que lleva tanto tiempo asentado supone un esfuerzo por parte los jugadores, que suelen cuestionarse o verlo con mal ojo. Aunque los cambios buscan ir a mejor, la sensación final que produce puede ser muy distinta a la esperada.
Pathfinder 2ª Ed. sigue teniendo el mismo carácter y personalidad que su predecesor, algo que transmiten muy bien sus ilustraciones de tipo cómic de aventuras. Pero, tomando el camino que Paizo inició con Starfinder, se desmarca, definitivamete, del resto de juegos de SD20.
Entonces, ¿merece la pena cambiar? Pues en esta parte siento ser equidistante y la respuesta es: “Depende”. Desde mi punto de vista, las claves que hacen de Pathfinder 2ª Ed. un gran juego son: Se han simplificado las reglas, sin llegar a hacerlo narrativo; además el juego ofrece más posibilidades, tiene más contenido, pero todo ello mejor organizado que su predecesor. Ha sabido combinar sistema “retro”, con elementos narrativos, para crear un juego que gusta tanto a jugadores veteranos como a novatos.
Por otro lado esta reticencia que los humanos tenemos por experimentar con algo nuevo la mayor dificultad a la que se enfrenta Pathfinder 2ª Ed. Tras años de estar familiarizados con su primera edición, con horas y tardes a nuestras espaldas, este cambio nos hace sentir torpes, con algo que deberíamos tener dominado o miedo al cambio.
Por mi parte, esta experimentación siempre me ha gustado, como ver que puede ofrecerme como máster y/o jugador o probar distintas “builds” de personaje. Daremos una oportunidad a este nuevo inicio, porque los otros libros siempre van a estar ahí. Y vosotros… ¿vais a intentarlo?
- Podcast #94: Píldoras Freak Wars’24 - 30/09/2024
- Podcast #93: Neimhaim: La Loba Blanca - 23/09/2024
- Podcast #92: ¡Eventos Cancelados! - 12/09/2024