Blades in the Dark es un juego de rol que nos transporta a Doskvol, una opresiva ciudad industrial de fantasía. En ella una joven banda intentará prosperar hasta que su nombre sea respetado en el submundo criminal.
Pero Blades in the Dark ha demostrado ser algo más que un juego de rol. Desde un setting adaptable a cualquier otro universo hasta un conjunto de minijuegos exportables a otros sistemas.
¿Queréis conocer que os propone este juego? Pues seguir leyendo
La propuesta inicial
Doskvol se yergue como una ciudad infinita. Los humos de la industria crean un “smog” que oculta los restos de un sol hecho añicos. La ciencia y la magia se mezcla para evitar los horrores que salen diariamente por Las Puertas de la Muerte, ahora rotas desde que sucedió el cataclismo.
La ciudad de Doskvol se encuentra encerrada por torres de rayos azulados, que evitan los espíritus vengativos y los horrores de las Tierras de la Muerte. Pero esta seguridad tiene un precio. Los generadores deben ser alimentados continuamente con la sangre ectoplasmática de los horrores que habitan el Mar del Vacío.
Sin ninguna esperanza empezáis una carrera criminal con el fin de sobrevivir y prosperar. ¿Qué líneas cruzareis en vuestro ascenso a la cúspide del poder? ¿Os haréis con el control de la ciudad o por el contrario seréis devorados por ella?
El sistema
Blades in the Dark cuenta con un sistema sólido, comprensible y sobre todo orgánico. Tras una breve explicación y un poco de juego, todos los conceptos que maneja quedan asimilados y máster y jugadores se centran en la historia.
Pero lo que hace de él un juego muy interesante no es el sistema en sí, sino como del mismo se pueden extraer y utilizarse elementos para otros juegos. Blades in the Dark se basa en la conversación, lo que define las acciones de que los “héroes” van a realizar para dar el golpe. Esto generará una serie de tiradas que se resolverán lanzando una cantidad de D6. Los 6s serán éxitos absolutos – sin consecuencias- los 5s y 4s éxitos relativos – con algún tipo de adversidad- y los 3s, 2s y 1s fracasos. Hasta aquí no se diferenciarían de muchos juegos.
La mejor forma de resumir el sistema de Blades in the Dark es con el refrán “Quien no arriesga, no gana” El juego maneja los conceptos de Situación y Efecto. La Situación representa la “dificultad” de la acción. El Efecto representa el posible resultado – bueno o malo – de la acción. Ambos se unen de manera que invita a arriesgar casi temerariamente con el objetivo de conseguir los Efectos espectaculares, pero el fracasar tiene un precio muy elevado.
Otros mundos
Si el planteamiento de campaña que Blades in the Dark propone ya es de por si atractivo: una tétrica ciudad steampunk de la que no se puede escapar, su potencial es enorme. Reutilizando elementos de otros trasfondos se pueden crear nuevos settings de campaña. Veamos algunos ejemplos:
Sin duda Warhammer 40K ofrece los planteamientos más interesantes y que primero se vienen a la mente.
Commorragh, la Ciudad Siniestra de los Eldars Oscuro – ahora drukhari -, es sin duda la mejor candidata para probar este juego, su altos y afilados capiteles, una sociedad dedica al hedonismo más puro y un sistema de Kábalas en continuo conflicto hace que el planteamiento de Blade of Darknest se ajusta a la perfección.
Necromunda sería el segundo candidato. Aunque el planteamiento es al principio muy parecido a Commorragh, los cambios de entorno pueden gustar más a los amantes de punkapocapipsis. Necromunda, supone una gigantesca torre de chatarra gobernada por las casas al servicio del Imperio que exprimen la sangre y el sudor de sus habitantes en un conflicto continuo por los restos de un plantea ya muerto.
Age of Sigmar, sin duda ofrece numerosas posibilidades en su universo grimdark de fantasy. Pero es Warhammer Fantasy y su Mordheim el que sin duda haría las delicias de los jugadores. Los jugadores tomarán el rol de Mercenarios obligados a adentrarse cada vez más en una ciudad maldita. Entre ellos y los secretos que guarda la ciudad se encuentran no muertos, cultistas del caos, demonios, skaven y otras bandas de saqueadores. La ciudad de Mordheim es sin duda uno de los grandes settings de fantasía.
Alejándonos del grimdark, podemos tomar mundos más cercanos. Los amantes de The Wire, Los Sopranos o los GTA pueden ver en Blades in the Dark una opción para llevar a las mesas una ambientación más actual del mundo criminal.
Opinión
Blades in the Dark es un juego con un fuerte componente narrativo que necesita la colaboración de todos los jugadores en la labor de dirección. Quizás para algunos, este sea el punto más difícil de salvar, sobre todo si los jugadores están acostumbrados a juegos con un corte más clásico.
Si bien su adaptación a otros mundos y settings de campaña es sólida, la verdadera fuerza de Blades in the Dark es la capacidad de exportar conceptos – los ya vistos Situación y Efecto – o reglas simples – por ejemplo, Relojes de Tiempo – a otros juegos con total naturalidad.
Blades in the Dark es un juego con el que merece la pena pasar un tiempo.
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